El colectivo de detectives explica que durante la campaña veraniega aumenta el fraude laboral en la hostelería. La tendencia empieza a ser la contratación por parte de trabajadores que necesitan a los detectives para probar y poder demostrar que se les está explotando en sus trabajos. Consideran que el perfil del defraudador ha cambiado porque ahora es más listo y cuidadoso. El colectivo pide que les permitan trabajar en la esfera pública porque están convencidos de que existen actividades fraudulentas como en la empresa privada

La labor de un detective es probar hechos, corroborar algo que el cliente quiere saber. El cliente necesita pruebas para demostrar aquello que cree saber y para ello se contrata a gente como Roberto, de Savia Detectives, quien ha explicado a este diario la situación actual del fraude laboral.

Afirma que es muy difícil conocer los datos de fraude, puesto que es complicado de controlar. Pero considera que se trata de un hecho que existe y que, según él, se mantiene constante, “es una tendencia común, y ahora, con la mala situación económica que atravesamos, la gente intenta aprovechar todo lo que puede”. El detective afirma que tanto directivos como empleados defraudan en sus empresas por lo que no puede hacerse una diferenciación entre estamentos. Ha querido resaltar que “el perfil del defraudador ha cambiado mucho, cada vez es más listo y más consciente de lo que puede y no puede hacer”.

También ha explicado que el hecho que más se está notando durante los meses de verano es el abuso laboral en la hostelería. “Han aumentado mucho los clientes que son trabajadores de la hostelería. Lo que buscan es que probemos y corroboremos que en su empresa los están explotando”, explicaba Roberto, que considera que su profesión es ser “notarios de la realidad, porque damos fe de lo que ocurre en cada trabajo. De nada sirven los datos que aparezcan en un ordenador si yo demuestro que no es así porque lo veo a pie de obra, en el día a día”.

Por último, el detective ha explicado que la labor del colectivo debe trasladarse también a la esfera pública porque considera que “si se defrauda en la empresa privada también ocurrirá en la empresa pública. Deberían permitirnos investigar en la administración para poder desenmascarar los casos fraudulentos”. El detective ha querido revalorizar el trabajo que desde su profesión llevan a cabo porque considera que son “la punta de lanza frente al fraude privado”.